PREPARACIÓN DE MI PRIMERA CARRERA DE RESISTENCIA (1ª Y 2ª PARTE)
1ª PARTE:
Ha llegado el momento. Voy a competir por primera vez en resistencia, de 90 cc, pero resistencia. Voy a sentir la presión de trabajar en equipo durante seis horas y minimizar los riesgos maximizando las vueltas rápidas. Tendré que aprender a pedir perdón y a perdonar los errores durante seis horas.Tendré que solventar las averias mecánicas que se puedan dar en seis horas luchando codo con codo. Dar lo mejor de mi físicamente durante seis largas horas.
Leido hasta aquí, parece épico. Incluso yo me lo llego a creer y esa es la intención que nace en mi hipotálamo, soy todo actitud.
La cruda realidad es que voy a ver como sale el invento, solo llevando en mi mochila mucha actitud; a ver si la diosa Fortuna en el circuito del mismo nombre se apiada de mi.
Pero por mi que no quede. Actidud y pasión a raudales. Me he montado un CAR (Centro de Alto Rendimiento) en casa, en el coche, en el metro (el CAR es móvil) en esta última semana. Atención a este dato, lo pongo entre comillas, «última semana». Si señor, un piloto como yo se pone hecho un toro y prevee la aparición de tendinitis, agujetas, dolores cervicales en una semana, ¿para que más tiempo?.
De momento, llevo desde el lunes que parezco una folclorica/famosa a la que le van a hacer una sesión de fotos en bikini. Toda la semana lechuga. Nada de dulce, canónigos y alfalfa a la tutti. Mi compañero de equipo me envía un mensaje anunciándome que como se prevee lluvia el día de la carrera, se va a poner ciego a caracolas de chocolate para ganar peso y tener más tracción en la rueda trasera. Maldita sea, yo no había caido en la lluvia. Y pienso: Caramba, este tipo es muy bueno, somos el equipo perfecto, uno lo dará todo en caso de que sea carrera en seco y el otro, en caso de que sea en mojado.
Pero yo sigo en mis trece. Soy de la opinión que menos kilogramos es mejor que más caballos. Mañana tengo un plan, por la tarde le diré a mi mujer que me esquile todo el cuerpo cual oveja con la máquina de cortar el pelo y así, habré perdido por lo menos un kilogramo más. Todo sea por la aceleración y estar en paz con la segunda ley de Newton.
En cuanto a la preparación física del CAR, dispongo de tecnología de hogar para llegar en un estado óptimo. Por ejemplo, para trabajar las piernas y la posición de la moto IMR, llevo desde el lunes que no me siento en otro sitio que no sea un balón de pilates imitando la postura de ataque de la moto. Y de vez en cuando, saco la pierna para rascar rodilla esté donde esté.
Esto, junto con sentadillas constantes cual luchador de sumo, hará que mis abductores parezcan de hierro.
Otro ejercicio fundamental del CAR es que voy a todos los sitios andando como un sonámbulo o momia, con los brazos extendidos y moviendo falanges como si estuviese en carrera cogido al manillar frenando y acelerando.
La gente por la calle me mira extrañada, pero tampoco voy a parar a explicarle a cada uno que estoy entrenando para una carrera de resistencia…
¿Y que pasa con el cuello?. Desde el CAR, me he auto-recomendado que lleve el casco en todo momento, llámese el aseo, viendo la TV o jugando con los peques. A mi mujer le parece ridículo, pero no se puede quejar, para ducharme e ir a dormir de momento, me lo quito.
El sábado intentaré estar todo el día con el mono, espaldera y guantes puestos para ir acomodándome a esa situación. ¿Que el sábado tenemos cumpleaños de un amigo de mi hijo en una ludoteca?. Bueno, espero que a los demás padres no les importe que vaya un motero. Además, puedo hacer de animador/astronauta por un módico precio, je.
Estamos a miércoles y de momento no he notado ninguna mejoría, en todo caso, he ido a peor. Mañana voy al médico; es muy probable que tenga bronquitis/neumonía. Así que me voy a presentar en carrera inflado con antibióticos, ventolin y paracetamol. Me río yo de Armstrong y su EPO. Como me hagan una analítica, lo voy a petar, je. Entre mi aspecto de Marques de Leguineche (pienso ir con batín y camisa), mi tos y mis tiempos, seguro que doy pena y me dejan que les adelante, je.
Si sigo todo esto a rajatabla, el domingo podré acabar la carrera, no pido nada más. Con ver la bandera a cuadros me conformo.
Lo de volver a casa desde Murcia después de una carrera de seis horas y liarme con los baños de los niños ya es otra cuestión que indudablemente, va a requerir mucha, mucha actitud y coraje.
Os tendré al corriente.
2ª PARTE:
Bueno, pues ya está todo hecho. Ya he pasado hambre durante una semana, ya me he dopado con todo lo que tengo en el botiquín, puesto que tengo una traqueobronquitis que no me va a ayudar mucho, la verdad. Y ya me he depilado hasta el ciruelo, de modo que he perdido peso y ganado aceleración, bravo. Mañana veré el resultado.
¿Y de que sirve todo esto?. Hombre, en una hipotética carrera contra gente amateur como yo, de mucho. Porque somos gente que de normal nos ponemos panceta/morcillas hasta con la madalena del desayuno; con mi entrenamiento CAR y mi nivel de pilotaje me veo capaz de acabar hasta en un puesto decente.
Pero eso en el caso de que la carrera de resistencia de 90 fuera para gente como yo: «papás gorditos y felices».
Pues no. Ahora resulta que me podía haber puesto ciego a comer cocidos, piernas de cordero, tartas, hamburguesas, etc porque el efecto habría sido el mismo, ya que ahora el destino no es ya ni acabar, ¡es clasificarnos para que nos dejen correr!.
Me pasa informe un amigo, en el cual nos avisa que a estas carreras suele ir gente de máximo nivel a entrenar con pequeños motores para derrapar, ganar fondo físico, jugar con el gas, etc.
|
Scott Redding jugando… |
¿Gente de máximo nivel?. ¿Con escuderias con carpas y mecánicos?. ¡Pero si nosotros solo llevamos dos taburetes y una sombrilla de playa!. ¿Estamos locos o que, esto que es, el CEV?. Reviso resultado de la última carrera y compruebo que encima, le dieron «cera de la buena» a Redding y a Jasper Iwema, aquí la gente camina muchísimo, glups. Esto va a ser lo más bizarro que he hecho en mi vida en moto. Ya os contaré «desde mi sombrilla y taburete al sol».